Nos aburrimos de siempre untarle mantequilla y queso crema a las tostadas, tortillas y sándwich para realzar los sabores. Para los que suelen tener antojos salados más que dulces, la salsa tzatziki aparte de ser baja en grasa y con un aporte mayor de proteína, le puede dar ese sabor especial y diferente a nuestras meriendas del día a día.
Mantenerla en la refrigeradora es una buena alternativa para reducir el consumo de grasas saturadas o “dañinas” y arriesgarnos a probar sabores diferentes, por ejemplo:
-Para la merienda de la tarde: Partimos unos pedazos largos de zanahoria y apio, y los sumergimos en la salsa tzatziki.
-Para otra merienda: A unas galletas de tortillas le agregamos unas rebanadas de pechuga de pavo, la salsa y unos trocitos de aguacate.
-Para el desayuno: Untamos 1 cucharada de la salsa en una rebanada de pan integral, le agregamos un huevo, una rebanada de queso, 2 cucharadas de aguacate, unas cuantas hojas de espinacas y unas cuantas gotitas de la salsa encima.
-Para el almuerzo en el trabajo: Alistamos un frasquito con la salsa y en el trabajo se lo agregamos a la ensalada.
-Para la cena: Al pollo desmenuzado que estaba en la refri, le agregamos salsa tzatziki al gusto. En un pan pita, agregamos el pollo, tomate, aguacate y arúgula.
Para elaborar la salsa tzatziki los ingredientes que necesita son:
- 1 ½ taza de yogurt griego natural
- 2 cucharaditas de aceite de oliva
- 2 dientes de ajo
- Medio pepino rallado
- 1 cucharada de eneldo
- 1 cucharada de limón
- Sal y pimienta al gusto
Ahora, en un tazón mezcle todos los ingredientes y está listo para ser agregado a cualquier preparación.
Dra. Pamela Madrigal A
Nutricionista 2423-17